
He aprendido que la oscuridad no es el fin, sino la puerta hacia la verdad de tu alma.
Hoy acompaño a quienes sienten que están perdidos… a recordar quiénes son, sanando la conexión con su espíritu y liberando su mente de los programas que los limitan.
Me dedico a canalizar y sanar los conflictos del alma, utilizando los desafíos del siglo XXI como un mapa de consciencia para que inicies tu propio viaje del héroe.
Para abrir el corazón a otros, primero necesitamos confiar.
Y la confianza nace cuando sentimos que la persona que tenemos delante ya ha caminado por ese mismo sendero.
Yo también he buscado guías en mis momentos más oscuros.
Sé lo que es sentirse sin rumbo, y sé la diferencia que hace encontrar a alguien que no solo hable desde el conocimiento, sino desde la experiencia vivida.
Por eso me atrevo a mostrar mis vulnerabilidades.
Porque hoy sé que en ellas habita mi fuerza.
Compartirlas no me hace débil; me hace real.
Y confiar en mostrarlas, me une más a ti.
Si estás aquí, permítete sentir que estás en un espacio de comprensión, respeto y amor.
No te hablaré desde la teoría, sino desde la coherencia, la práctica y el amor profundo hacia mí misma que me permitió salir de mi propio infierno para crear mi cielo en la tierra.
Durante 23 años trabajé en una empresa privada mediana en un puesto de responsabilidad, gestionando equipos por toda España.
Durante la crisis sanitaria lideré procesos complejos en el sector sanitario y geriátrico, creando orden, estructura y sostén emocional en medio del caos.
Esa etapa fue un entrenamiento para la vida: aprendí a unir liderazgo, empatía y consciencia, lo que más tarde se convirtió en la base de mi transformación personal y profesional.
Mi cambio no fue una huida, fue una evolución natural hacia la verdad de mi alma.
Hoy dedico mi vida a acompañar a otros en su propio proceso de transformación, de dos formas creando productos espirituales y con las mentorías.
Uniendo mente, energía y espíritu.
Si deseas conocer más sobre mi historia —con sus luces, sombras, retos y aprendizajes—, te invito a abrir el desplegable que encontrarás más abajo.
Lo comparto con sinceridad, humor y amor, porque cuando sanas, comprendes que todo fue parte del camino que te trajo hasta aquí.
Y si prefieres algo más concreto, sigue leyendo mis formaciones y credenciales, donde encontrarás el recorrido que sostiene mi práctica profesional y mi visión espiritual.
LOS RETOS Y LAS SUPERACIONES EN MI VIDA QUE ME HAN CONVERTIDO EN UNA EXPERTA EN LO QUE ENSEÑO
Naci en una familia unida pero desestructurada.
Con un padre que su medio de comunicación era a base de maltrato físicos y emocionales, desde que empecé a tener consciencia, se activo el modo de supervivencia, adaptándome a todo lo que me decían que hiciera.
Fueron muchísimos años así, callada en silencio sólo aguantando, sintiendo cosas, situaciones que ningún niño/a debe de ver o sentir…pero ahí estaba sin haberlo elegido, sin niñez con gritos, penas, abuso, soledad, tristeza, falta de comunicación, de amor.
Cerraba mis ojos y solo quería desaparecer…
Era una niña muy introvertida, además de conectada era capaz de percibir otros planos, escuchar otras energías, muy intuitiva, pero en vez de agarrarme a mi conexión, la elimine, no quería sufrir aún más, generé un escudo protector y me centre en vivir.
Sentía una profunda soledad, sentía un rechazo frustración, no entendía para que había venido a este mundo.
Realmente me quitaron la niñez, no pude vivirla y me convertí en una niña mayor, ultra cuidadora de todos, excepto de mi.
Crecí en un entorno de miedo y silencio, sin poder expresarme y aprendiendo a esconderme del dolor.
Entre la enfermedad y el acoso, comencé a comprender —sin saberlo— que la vida me pedía poner límites y amarme.
A los 14 años, cuando una profesora dijo que “no servía para estudiar”, algo se encendió en mí.
Decidí salir del infierno por mí misma: estudiando de noche, en silencio, hasta cambiar mi destino.
Hoy sé que ese fue mi primer acto de amor propio y liderazgo: dejar de esperar validación y empezar a creer en mí.
Cuando salí del infierno, salí con fuerza para vivir, porque al final no había vivido, no sabia lo que era una niñez normal o una adolescencia normal, así que con 21 años lo único que quería era respirar, conocer, vivir, de todas las formas posibles, de todos los modos posibles.
Pero con todas las heridas que llevaba, eso no tardaría en salir, y claro el amor es un brillante espejo para verse, aunque en aquel tiempo mi grandes dos heridas soledad y rechazo sangraban y por eso necesitaba el amor aunque aún no sabia que era yo quien lo creaba.
En mi interior seguía sin conectar con mi alma, pero esa parte de mi, esa intuición que escuchaba, una pequeña voz me susurraba que buscara, no sólo en la parte física de este plano, también en la parte energética por ello decidí empezar autoconocerme a través del Reiki y los Akásicos.
Esta fue la forma que encontré de conectar con mi alma y con mis guías, rápido sentía que esa parte era fundamental en mi.
También fui consciente de la desconexión profunda que tenia con mi cuerpo y con mi alma, todo debido a ese escudo para evitar el dolor tan grande que tenía, pero………….
Conocí a una persona que en ese momento me ofreció vivir en pareja.
Sabia que ir por el camino del alma era de dolor, abrir heridas, asique preferí seguir en mi ceguera y vivir una vida normal, casándome y trabajando en lo que supuestamente me gustaba y había estudiado.
Siguiendo los cánones y desesperada por encontrar amor y llenar el vacío de mi interior, ciega muy ciega a mis puntos ciegos, a lo que quería mi alma, tenia un absoluto desconocimiento de mi.
Repetí los patrones que había aprendido, callando y sosteniendo más de lo que podía.
Hasta que el cuerpo gritó lo que mi alma ya sabía: no quería vivir porque no me sentía viva.
Mi enfermedad fue el espejo perfecto para mostrarme lo que negaba.
Y justo cuando toqué fondo, una voz interior me susurró: “Mónica, hay más. Esto no acaba aquí.”
Ese instante lo cambió todo.
Sentí el amor universal atravesarme y entendí que quería vivir, que la vida me ofrecía otra oportunidad.
Desde ahí comenzó mi verdadero renacer — físico, emocional y espiritual
Compromiso hacia misma fue y es lo que ha marcado y marca mi vida en cada momento.
Adelgacé 56 kilos, y no penséis que fue fácil, requirió de mucho esfuerzo físico y mental antes de la operación y después mucho esfuerzo emocional.
No solo una adaptación a mi nuevo cuerpo, también un cambio drástico para aprender a como comer.
Poco a poco se generó dentro de mi una fuerza que hizo que siguiera tomando decisiones y accionando.
Fui madre, me divorcie y empecé a sanar.
Era muy consciente que aunque tenia la oportunidad de vivir tenia que cambiar por dentro porque mi forma de pensar me había llevado a esta enfermedad, este golpe del universo había venido para despertarme.
Consciente de mi forma pensar , me centre en conocimiento y en experimentarlo en mi, empecé con neurociencia y coaching.
Faltaba algo, faltaba la conexión con mi alma, por ello indagué en coaching cuántica, aprendí a ver puntos ciegos, mis puntos ciegos, y reventaba cada vez que veía algo de mi, rompía mi mente una y otra vez mis creencias.
Moria y vivía, ruptura de la conciencia y creación de nueva conciencia, una nueva yo, una y otra vez.
Faltaba el alma, faltaba conectar con mi cuerpo y sentir mi alma, y así entro en mi vida la técnica del Thetahealing.
Esta es la técnica que más me ha cambiado y lo sigue haciendo aun hoy después de muchos años, porque cada día la sigo practicando.
Conectar y elevar tu conciencia trabajando con la energía del amor universal, cambiando tu forma de pensar en el plano cuántico y creando una más afín, conectando con guías, ancestros, viendo otras vidas comprendiendo la dimensión que tenemos, que tienes tu en esta vida y en otras.
Así uní todo, mi alma mi ser, mi cuerpo físico, con todo, poco a poco fui trabajando y perdonándome cada cosa que iba descubriendo de mi pasado, de mis heridas, sanando, amándome mucho más y dándome mucho equilibrio.
Es aquí cuando empecé a sentir que tenia que compartir lo vivido y mi sanación con otros.
Pero esta vocación que siempre había tenido solo salió cuando estaba preparada, cuando yo, lo había practicado tanto conmigo, que sentía el compartirlo.
Todo lo que enseño lo he vivido en mí.
Mi camino comenzó sanando mi propia mente y alma, y desde esa experiencia real acompaño hoy a otros en su transformación.
Antes de guiar, aprendí a liderar mi propia vida con coherencia, integrando lo aprendido y convirtiéndolo en práctica viva.
Ahora comparto ese recorrido para que tú también aprendas a ver tus puntos ciegos y transformarlos en luz.
Aquí puedes ver MI EXPERTISE que está en continua EVOLUCIÓN:
Formadora en Inteligencia Evolutiva con Ondas Gamma.
Terapeuta Transpersonal Energética en Thetahealing.
Maestra en Registros Akáshicos.
Maestra en Reiki Usui.
Coach experto en ejecutivo por ICF.
Creadora del Método Bussiness Visionary
Experto en Minfulness personal,
Experta en liderazgo personal.
Formadora en Yoga Nidra para meditar.
Coach Cuántico con master en esta técnica.
Experta en el método Design Thinking.
En Thetahealing (Ruptura de programas en el Adn ) soy además Formadora en:
-Adn Básico
-Adn Avanzado
-Indagación
-El Creador y tú.
-Tu y tus Otros (Almas Gemelas 1)